sábado, 13 de mayo de 2006

Gehenna (infierno)

Infierno es no verte, buscarte y no hallarte, es estar vacío, sentir frío aunque haga calor y a la inversa, no encontrar la palabra apropiada para expresarte, tu ausencia, mi soledad, el silencio, la mirada al infinito con abismo bajo los pies, la tormenta de verano y los pasos no dados.
El infierno yace en mi conciencia, el fuego lo pongo yo y mis carencias, los pecados también los pongo yo con mis errores. El tiempo de duración de este mi infierno es ilimitado, depende de la pena que me haya puesto y de las ganas de purgar mis dolores. Incluso a veces me doy un respiro y luego sigo subsanando el daño cometido.
Tu infierno es no palpable, es el reflejo que das de tu expiación, que tan sutilmente aderezan algunos y el grado de comparación que todos los mortales ponemos.
El infierno está en el interior de cada uno, en vivir todos los días con la culpa, en no perdonarse y en no perdonar. El infierno es el no amor.

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