lunes, 21 de agosto de 2006

Poema de la mujer de Dunas Ben Labrat

¿Recordará su amado a la cierva graciosa
el día de la partida, con su hijo único en brazos?
Puso él en su mano izquierda el anillo de su diestra,
en su brazo puso ella su ajorca;
al tomar ella su velo como recuerdo,
cogió él el suyo para no olvidarla.
No se quedará él en Sefarad
aunque recibiera medio reino de su Señor.

[Dunas Ben Labrat, poeta judío que vivió durante el califato omeya, éste es lo poco que queda de un poema que su mujer le escribe a su partida de Sefarad, probablemente una de las primeras mujeres judías poetas, curiosamente se desconoce el nombre de ella.]